YOGA
¿Solo se trata de sentarse con los ojos cerrados y meditar?¿Es una religión?Estas son preguntas que a menudo nos hacemos…
El primer error es pensar que yoga es masculino,
…Como una reliquia en las profundidades del tiempola yoga no se ha inventado, se ha descubierto.Entendemos que es un estado de uniónentre cuerpo, mente y alma, es una disciplina espiritual y corporalque permite la expulsión de las tensiones y preocupacionesde la vida cotidiana. En pocas palabras no se puede decirque la yoga se haya inventado,si desde siempre ha estado dentro de cada individuo.La esencia de la yoga no se nos revelaa no ser que conozcamos sus orígenes,su significado, sus facetas, sus bondades y sus peligros.
Hay que conocerla, respetarla y amarla.Pero antes que nada hay que comprobarla.
Cada una de sus técnicas debe ser realizadacomprendiendo su significado para poder llegar al resultado.
La constancia, la paciencia y voluntadson puntos claves para llegar a la meta.
Pero, ¿Cómo llega a nosotros los occidentales?;
Como toda actividad humana,por más conservadora que sease adapta al paso del tiempo y los cambios de hábitat.Si bien hay varias ramas de yogacon diferencias bien marcadas,se dice que, hay tantas ramascomo profesores que la dictan;dependiendo, por supuesto,de sus conocimientos y preparación.

La yoga Occidental:
Como antes dije la yoga sufrió una rupturadesde sus comienzos religiosos, filosóficos y antiguos.
La yoga que actualmente practicamos es científica,ya que sus técnicas físicas posturalesestán comprobadas científicamente,para probar sus beneficios;si en alguna postura o ejercicio se advierte peligropara nuestra evolución corporal,se desecha de las prácticas. La parte enérgica que se activa en cada clasetambién puede comprobarseya que ahora existen y se conocenelementos que miden la energía. Y la parte espiritual, solo se comprueba practicando la actividad,rápidamente uno nota los cambios de humor, de ánimo, el mejoramiento del carácter, de la mente, de los comportamientos, más concentración, atención mental y memoria, la conciencia, voluntad y el autodominio; entre otros.